Le dieron una semana de vida, pero sobrevivió un mes para ir al último partido de su hijo

Ese abrazo valió toda la pena.

Corría el mes de agosto, cuando a Scott Sullivan, un hombre de 50, le diagnosticaron un tipo de cáncer que tan solo le permitiría vivir unas cuantas semanas más a partir de ese momento. Desde su diagnóstico, el hombre fue remitido al Hospice of Lake Cumberland, en Somerset – Kentucky, en Inglaterra.

Una vida digna y feliz hasta el último instante.

Debido a que la enfermedad conocida como carcinomatosis leptomeníngea, no tiene cura, Scott, estaba siendo tratado en una institución que cuida de las personas en sus últimos días de vida, brindándoles apoyo médico, sicológico y espiritual. Allí, el hombre conoció a una enfermera con la que se hizo amigo al tener largas charlas sobre cada uno de sus hijos, ella se llama Jerree Humphrey,

Poco a poco, Jerre fue conociendo el buen corazón de su paciente y entre una charla y otra, supo que el hombre tenía un propósito personal bastante inspirador. Luchar contra la enfermedad para permanecer con vida hasta el 11 de septiembre, día en que su hijo, participaría del primer partido de fútbol americano de la temporada en su escuela, ubicada en el condado de Pulaski a más o menos cuatro horas de donde el hombre estaba internado.

Jerree Humphrey / WashTV

Por supuesto Jerree, le hizo saber a Scott, que por su condición no era algo recomendado, porque en total serían alrededor de ocho horas viajando en un coche. Sin embargo, el hombre con su buen sentido del humor, le dio sin querer a la enfermera una idea que le quedó rondando la cabeza: un helicóptero.

Entonces él dijo, ‘¿Qué piensas de que me vaya?’, Y yo dije, bueno, realmente no lo sé porque es como un viaje en auto de tres horas y media, luego tres horas y media de regreso, así que pensé que si estaba tan lejos, unas siete u ocho horas en coche, realmente no sería factible, ya sabes. Así que se rio un poco y me dijo: ‘¿Tienes un helicóptero en tu patio trasero?’ – Contó Jerree Humphrey al medio de comunicación.

Una posibilidad para aprovecharla.

Al cabo de unas horas y luego de un par de llamadas con unas amistades cercanas, la mujer logró conseguir un helicóptero de un amigo dentista y un piloto local, dispuestos a ayudarle con el viaje de su paciente. Cuando la mujer le dijo a Scott lo que había logrado conseguir, él no podía creerlo, pues como era de suponerse, estaba extremadamente feliz de ver a su hijo.

El helicóptero despegó con Sullivan, su novia y los demás tripulantes a bordo, pero nadie estaba tan emocionado como él. El hombre tenía una sonrisa de oreja a oreja, como si todos sus dolores, temores y demás ya no estuvieran, y era entendible, su deseo se había hecho realidad gracias a la enfermera.

Ya en el lugar del juego los emocionados asistentes se ubicaron en un lugar con vista privilegiada y cuando el joven vio a su papá a lo lejos, corrió para abrazarlo y agradecerle por estar presente en un día tan importante para él.

Lo abrazó con tanta fuerza y ​​estaba muy agradecido de que estuviera allí – Aseguró Jerree Humphrey al sitio de noticias.

Acabado el juego, los viajantes tuvieron que regresar al centro de atención, pero de regreso todos en el helicóptero viajaban felices de haber sido partícipes de un momento tan especial para la familia Sullivan.

Historias como esta, nos hacen sonreír de principio a fin. Aplaudimos el esfuerzo de estas personas, por hacer realidad los deseos de todos estos pacientes especiales y esperamos que cada uno de ellos se sienta muy feliz y amado hasta su último suspiro.

Fuente: Hospice of Lake CumberlandWhasTV.