Lo dejaron a su suerte porque nació sin ojos, pero cientos de madres quisieron adoptarlo

Nuevamente el mundo demostró que puede ser esa familia que le falta a los niños que fueron dejados solitos.

En la lejana Siberia, al norte de Rusia, se levanta la ciudad de Tomsk, una de las capitales principales de la fría zona. En ese paisaje desolador, un hecho milagroso y poco común ocurrió en abril de 2019. Una joven, de quien se desconoce el nombre, dio a luz a Alexander K, un hermoso bebé que ya tenía anunciado un futuro difícil con una rara enfermedad genética que solo han desarrollado tres niños en el mundo.

Valery Kasatkin

Con el destino marcado y al ver su incapacidad para cuidarlo de manera correcta, la mujer decidió dejarlo en un orfanato donde el pequeñito, conocido también como Sasha, conmovió a todos haciendo que su historia llegara a cada rincón del planeta.

La historia, tristemente, se repite.

Aunque por razones legales los nombres de su familia biológica nunca fueron revelados, sí se sabe que la historia de su mamá tampoco fue la mejor. La joven, además de quedar embarazada a muy temprana edad, también había crecido en un orfanato sin vínculos cercanos.

Ese detalle y la falta de una familia que la apoyara, fueron claves para que, en el último trimestre de su embarazo cuando fue notificada de la condición del pequeño bebé, decidiera no conservarlo, pues, aseguraba, no tenía las condiciones óptimas para hacerse cargo de él.

Valery Kasatkin

De esa forma nació el pequeño Alexander, un hermoso bebé sonriente y muy cariñoso que desarrolló una rara malformación genética conocida como anoftalmia, proveniente de la mutación de la proteína SOX2, que provoca la ausencia de globos oculares y tejidos de la zona muy pequeños a comparación de un organismo normal.

Tiene los ojos del corazón y merecía una familia como la que tiene ahora.

A pesar de su difícil comienzo, Alexander creció en un lugar donde tuvo todo el apoyo de médicos y personas que lo amaban y cubrían de manera perfecta la ausencia de su mamá, además, desde el inicio, el pequeño mostró ser un milagro viviente: aunque la enfermedad suele venir acompañada de otras dolencias, el pequeño Sasha nunca tuvo ningún tipo de complicación adicional.

Valery Kasatkin

Desde el primer momento en el que la noticia de su extraña condición, que antes de él solo habían tenido otros dos bebés en la historia, circulara en los medios locales buscando una familia que lo quisiera, el pequeño tuvo infortunios pasando por muchas familias temporales que llenas de miedos debido a los que creían, sería un difícil futuro con muchos cuidados, una y otra vez lo apartaron de su lado.

Valery Kasatkin

Los meses pasaron y mientras Sasha cumplía con sus estrictos controles médicos, muchas peticiones de adopción llegaron del extranjero, sin embargo, enfermeras del orfanato donde permanecía, siempre recalcaron lo difícil que eran los trámites burocráticos para una acogida por fuera de sus frontera, por lo cual, resistieron hasta diciembre cuando el milagro de navidad llegó: Alexander K fue requerido por una familia del mismo país que, aunque permanece anónima, ya lleva casi un año siendo el hogar que este pequeño sonriente merecía.

Valery Kasatkin

Por ahora, su historia clínica sigue llenándose de revisiones constantes y chequeos que tendrá que llevar de por vida. Aunque tiene dos quistes en su frente, los médicos ya comprobaron que son benignos y no tienen ninguna implicación negativa en su desarrollo como un bebé sano, fuerte y feliz.

Por fortuna, parte de la enfermedad de Alexander podrá ser controlada con prótesis oculares que tendrán que ser cambiadas cada cierto tiempo en su crecimiento, evitando que su estructura ósea se deforme.

Aquí puedes ver un pequeño video de un reportaje hecho al bebé:

Alexander no tuvo el mejor de los comienzos, sin embargo, nunca ha dejado de sonreír. A pesar de que su vista no se desarrollará ni podrá ver, el pequeño ya cuenta con una amorosa familia que está dispuesta a ayudarlo y amarlo en todo momento. Él les ha enseñado que solo necesita su enorme corazón para ver todo el mundo.

Fuentes: The Siberian Times, Daily Mail.