Adolescente experimenta en carne propia qué es ser mamá y está apunto de tirar la toalla

La madre de esta adolescente, se está divirtiendo mucho viendo a su hija sufrir siendo mamá.

Lawren Cole Galloway quiso compartir la experiencia que vivió esta semana con su hija Olivia de 14 años de edad, la mayor de cuatro hermanos: una niña de seis años, un niño de ocho y una bebé recién nacida de tres semanitas de edad.

Ella relató que Olivia siempre la ayudó con sus otros hijos y que por eso presumía estar lista para ser mamá, aunque por supuesto, esto no estaba entre sus planes inmediatos.

Lawren Cole Galloway

No obstante, una asignatura de su escuela llamada Early Childhood Education Class, algo así como «Clase de Educación Infantil» la puso en el difícil rol de ser madre adolescente e hizo que cambiara radicalmente la idea que tenía de sí misma y de lo que es ser mamá.

¿De qué trata esta asignatura escolar?

El objetivo de la clase es hacer que los adolescentes tomen conciencia de todas las implicaciones que tiene tener un bebé a su edad, para que se tomen muy en serio el tema y eviten involucrarse en una situación para la que, de ninguna forma, están preparados.

Para lograr este objetivo, le entregan a cada alumno un muñeco con forma de bebé, pero no sólo eso, este está programado para llorar, pedir comida y hasta enfermarse exactamente de la forma en que lo haría un bebé real.

Al principio a los jóvenes les parece fácil y hasta divertida la experiencia, pero ha medida que pasan los días la situación se torna bien difícil de lidiar.

Por supuesto, el bebé va guardando los datos de las respuestas de la madre o el padre, según corresponda, para al final obtener una calificación.

Lawren Cole Galloway

Por ejemplo, son las dos de la mañana y el bebé comienza a llorar, lo que tendría que hacer la madre o el padre es levantarse de inmediato y atenderlo: calentarle su biberón, darle de comer, verificar que no esté enfermo, esperar a que se vuelva a dormir, etc. Si ellos no lo hacen o lo hacen mal el bebé acumulará en su memoria esa información y generará un resultado de su salud. Si al finalizar la semana el bebé artificial no está en buen estado, el adolescente perderá la asignatura.

De esta manera obligan a los adolescentes a vivir la experiencia y no simplemente a llevarse al bebé a su casa, guardarlo en un cajón y a la semana devolverlo a su maestra. No, la experiencia es completa y bastante cercana a la realidad.

Volviendo a Olivia y su madre.

La chica de 14 años de edad comenzó muy entusiasmada la semana, como tenía cierta experiencia cuidando a sus hermanos, sintió que podría sacar fácilmente las cosas adelante pero se equivocó, pues a los poco días la experiencia la tenía completamente agotada.

Mi momento favorito hasta ahora fue cuando ella entró en mi habitación anoche alrededor de las 3 a.m. Tenía lágrimas corriendo por sus mejillas mientras le daba su biberón. Me rogaba que la ayudara porque solo quería dormir un poco. – Le contó Lawren a Love What Matters.

De manera muy astuta, la madre le dijo que no, pues entendía la importancia de que Olivia comprendiera que cuando se es madre no hay descanso.

El domingo por la noche, William (el nombre asignado al bebé artificial) comenzó a llorar por arte de magia tan pronto como preparé la mesa para la cena … fue casi como si lo supiera. para hacer la historia corta, Olivia tuvo que calentar su plato 3 veces. La alimentación del bebé duraba casi 20 minutos, requería un eructo, un cambio de pañal y unos 12 minutos de balanceo. – Continuó Lawren. Después de una cena desastrosa, Olivia fue a ducharse. Cargó a William en el asiento para el auto y lo llevó al baño con ella. Terminó bastante rápido y explicó que decidió tomar un baño. Ella no tuvo tiempo de lavarse el cabello y tenía miedo de que él comenzara a llorar y la necesitara.

Lawren Cole Galloway

Al acabar la semana, cuando Olivia le entregó a su maestra al bebé William, el resultado fue desastroso y la chica perdió la asignatura, No obstante, renovó su compromiso y aceptó iniciar una nueva semana con un nuevo bebé artificial.

Lawren Cole Galloway

Esperamos que está semana si tenga éxito, pero consideramos que ya ganó, pues aprendió que tener un bebé es un trabajo agotador de tiempo completo.

Una gran lección.

La madre finalizó diciendo que esta había sido una verdadera experiencia de vida, que le había enseñado toda una lección a su hija y dijo también que sería muy positivo que todos los alumnos la tuviera que tomar ya que esta no es una asignatura obligatoria sino opcional.

Fuente: LoveWhatMatters.